Como comentamos en una entrada anterior, la andragogía hace referencia a cómo aprenden los adultos y en qué maneras se diferencia del proceso de aprendizaje de los niños/as. La cuestión principal de este tema es que los cursos que se desarrollan no tienen en cuenta lo que la andragogía implica y hacen un mal uso de la misma.

 

Para crear cursos de eLearning, el paso principal es entender de qué formas aprenden los adultos. Normalmente son autónomos y auto-dirigidos, tienen una gran experiencia de vida y por consiguiente mucho conocimiento, son prácticos y exigen respeto. Algunas de las implicaciones necesarias son:

 

  1. Capta su atención desde el primer momento

Tienes que asegurarte de que se llevan una buena primera impresión; si lo logras, harás que su atención y participación sea mucho más exitosa.

 

Algunas maneras de implicar a los alumnos son:

  • Cuenta una buena historia.
  • Asegúrate de que el aprendizaje sea un proceso agradable y divertido: el concepto clave es que todo tiene que ser práctico.
  • Estimula la interactividad: juegos educativos, materiales portátiles, etc.
  • Usa recursos visuales atractivos.

 

  1. Aprovecha su grado de experiencia

Las experiencias de vida pueden ser fuentes importantes de conocimiento a las que se puede hacer referencia para conectar durante el proceso de aprendizaje. El objetivo principal es que apliquen lo que ya conocen.

 

Algunos ejercicios podrían ser:

  • “Qué pasaría si…” en un curso de simulación con un software.
  • Juegos de rol
  • Estudios de casos de la vida real
  • Debates en grupo

 

  1. Haz que los estudiantes alumnos se sientan atraídos hacia el aprendizaje

Hazles ver que el “por qué” es conveniente aprender cosas nuevas, teniendo en cuenta sus deseos y haciéndoles sentir que su opinión es importante.

 

  1. Deja que tus alumnos elijan libremente

Permíteles elegir cómo, dónde y qué aprender.

 

Algunas formas de empezar son:

  • Deja que controlen el curso en parte y ofréceles la oportunidad de mantener discusiones activas.
  • Haz que el curso sea flexible: imparte el contenido en formas diferentes.
  • Ofréceles opciones.
  • Actúa como un facilitador con quien pueden contar, pero déjales tomar el mando.

 

Estos son algunos de los posibles e infinitos consejos a la hora de diseñar cursos de eLearning para adultos, basándonos en este atrículo :https://www.shiftelearning.com/blogshift/bid/352843/Dise-ando-eLearning-para-adultos-Utilice-estas-cuatro-estrategias. Desde CIDET queremos ofrecer algunas sugerencias más que podrían complementar las que ya se han mencionado:

 

  • Distribuye un cuestionario sobre lo qué cambiarían y qué sugerencias proponen a mitad o final del curso para poder tener en cuenta la opinión de los mayores.
  • Propón actividades prácticas en grupo como puede ser la creación de presentaciones o la resolución de problemas.
  • Si el curso es largo, destina una clase para el debate. Los estudiantes adultos podrán elegir el tema o simplemente se podrá discutir sobre el curso en sí.
  • Reserva algunas clases para que cada alumno exponga los beneficios que está obteniendo durante el curso y sugiere que lo hagan a través de herramientas tecnológicas que se hayan dado en clase.